domingo, 12 de julio de 2015

Red Bull fabricará autos para clientes



El equipo cuatro veces campeón de Fórmula 1, Red Bull, confirmó que seguirá los pasos de Ferrari y McLaren, al crear una división que fabricará autos para clientes. El proyecto estará a cargo del exitoso diseñador Adrian Newey. Los vehículos serán fabricados por Aston Martin y tendrán tecnología de Mercedes-AMG.

El anuncio lo realizó Red Bull Technologies el fin de semana pasado, durante el Gran Premio de Inglaterra. Allí se conoció el proyecto de Aston Martin de ingresar a la Fórmula 1, de la mano de la escudería de las bebidas energéticas.

Una revista britanica indagó un poco más para descubrir que, detrás del proyecto deportivo, también hay un plan industrial: fabricar un hyperauto (más que un superauto) para rivalizar contra productos como la Ferrari LaFerrari y el McLaren P1.

Se espera que el auto salga a la venta en 2018. La alianza aún no definió si será un auto homologado para la calle o si quedará reservado para track days. Lo que sí se sabe es que heredará la tecnología de la escudería que revolucionó la Fórmula 1 en los últimos años, de la mano del proyectista más exitoso: el inglés Newey.

Aston Martin se apoyará en la experiencia de Red Bull para su ingreso a la Fórmula 1. Pero le abrirá a la escudería sus secretos industriales para crear un deportivo extremo para clientes, como ya hizo con el modelo Vulcan: un track-car en fibra de carbono, con un V12 7.0 de 800 caballos.

La alianza aprovechará también el acuerdo de intercambio tecnológico que Aston Martin tiene con Mercedes-AMG. El especialista alemán en autos de alta performance podría proveer la mecánica y toda la tecnología electrónica que necesita un superauto del Siglo XXI.

Christian Horner, jefe de equipo de Red Bull Racing, aseguró que el proyecto de un auto para clientes es algo natural en la evolución de la escudería: “Es algo que Adrian Newey quiere hacer como un legado de su paso por Red Bull. Hasta ahora, estuvimos enfocados en nuestro trabajo como constructores de Fórmula 1. Pero, en la medida en que más tecnologías se cruzan de los autos de competición a la calle, hacer un auto para el mercado de clientes particulares es una idea que fue creciendo de manera orgánica en el equipo”.

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